domingo, 12 de octubre de 2008

martes, 15 de abril de 2008

Regalo

(Nos los dan y nos los quitan, como un caramelo a un niño)

El pensamiento positivo da pensamiento positivo.
El pensamiento negativo da pensamiento negativo.
Se me ha concedido un regalo y doy gracias a Dios por ello...
La monotonía se combate con actividad, proyección de la energía hacia lo positivo y confía, pero en pocos, en los intimos, date a él porque es bueno, aunque no es como te esperabas que iba a ser, por algo deberá ser a sí y el tiempo te contestará (Steve Jobs) de delante a tras se sabe la respuesta, no podemos comprender en otro sentido que en este, las cosas y porqué se suceden así los acontecimientos, hay que esperar simplemente que ocurran y sucedan y pasados estos, comprenderemos.


Steve Jobs Stanford Commencement Speech 2005



Estamos atrapados en nuestros cuerpos, limitados en nuestras mentes, limitados en nuestro lenguaje limitado y como limitados e imperfectos que somos, tenemos que ser sencillos y esperar a que se nos revele nuestra misión en el mundo. Que quizá es simplemente amar.

Mientras hacemos proyectos, pasa la vida. Nuestro tiempo es limitado en este infinitesimal segundo en que transcurre nuestra vida, nuestro tiempo en el mundo, comparado con el del universo y su infinito tiempo. Que importo yo, que importa él, nada, nadie, "todos somos prescindibles". Este simple comentario puede ser fatal...
y mi pequeño mundo cambió y se desmoronó tras su marcha, pero quizá tenía que ser sacrificado, para que yo encontrara este regalo, para que mi mundo cambiara, para que yo cambiara, para que aprendiera a quererme

Xela

miércoles, 2 de abril de 2008

Homenaje a Paul Auster

Una frase de un autor frances Joseph Joubert: "Los poetas, los filósofos y todos los lectores de libros, son aquellos para quienes el mundo no basta" y afirma Auster: "La escritura es una enfermedad, escribimos para compensar carencias, quizá para curarnos". Frase de Scott Fitzgerald: "La señal de una inteligencia de 1º orden es la capacidad de tener dos ideas opuestas presentes en el espíritu al mismo tiempo y, a pesar de ello, no dejar de funcionar".

El arte es inútil, pero ¿que tiene de malo la inutilidad? ¿acaso la falta de sentido práctico supone que los libros, los cuadros...son una pura y simple perdida de tiempo?.
El valor del arte reside en su misma inutilidad. La creación de una obra de arte es lo que nos distingue y define, en lo esencial, como seres humanos. Hacer algo por puro placer, por la gracia de hacerlo.

domingo, 17 de febrero de 2008

La Familia "R"



Era se una vez, una madre y su hija que volvían del colegio en autobús se llamaban: Rosa y María.
María iba entretenida mirando por la ventana, leyendo en alto, los letreros de la calle. Estaba aprendiendo a leer, de repente le dice a la mamá:
-¡Mamá! ¡Mama!, ¡Mira! ¡Mira!.
La niña haba visto a la letra “L” parada en el semáforo, se puso en rojo, el autobús para y la letra “L” cruza y cuando va a mirar la madre ya no ve nada, y dice:
-¡Pero hija!, ¿Cómo vas haber visto una letra andando por la calle?, ¡Es imposible mi vida!, Las utilizamos para hablar y escribir y entendernos, pero aunque la lengua está viva. Las letras, el alfabeto: no puede andar, ni respirar, ni comer, cielito. Y dice la niña:
- Sí mama, yo lo he visto.
Pasaron otra parada y en esta lo volvió a ver y esta vez también lo vio la madre.
-¡es verdad¡ ¡dijo la madre!.
Ya les tocaba bajar en la siguiente, iban andando cuando entreteniéndose mirando el escaparate de una tienda, María volvió a llamar a su madre atropelladamente:
-¡Ma-má! ¡Ma-má! No te lo vas a creer, mira, mira. Y en esto, que vieron dentro de la tienda comprando, a la letra “R”, a la letra ”a” “a” y la “u” que iba en una sillita.

Rosa, la madre, se quedó con la boca abierta, muda. Dentro en la tienda estaban despachando con toda naturalidad a lo que parecía ser una familia de letras.

Entraron para comprar y no pudieron evitar sentirse sorprendidas, ni disimularlo. Estaban viendo ropa en los percheros y cada cierto tiempo miraban para ver si seguían ahí, si hablaban, como hablaban, si era el mismo idioma o no se las entenderían. Parece ser que sí, que hablaban igual, e incluso una de las niñas “a” se dirigió a María y tirándole de la falda la saludó:
- Hola, soy “a1” y esos son mis hermanos “a2” y “u” y mi mamá “R”.
-Hola, dijo María un poco aturdida por la impresión. Mirando a su vez a su madre.

Ahora sigue tú la historia...


Xela

lunes, 14 de enero de 2008

El Joyero Magico



Era sé que se era, una niña de cinco años, y un mueblecito de tres cajones, éste era el juguete favorito de la niña, donde guardaba sus joyitas.

Sabía que era diferente de los demás niños, era porque tenía un secreto con su juguete. ¿Os preguntareis como se puede tener un secreteo con un juguete?, ¡Pues era sencillo!, Porque este le hablaba, le hacía viajar a lugares increíbles y jugar al escondite con sus cosas y hacerle trucos de magia a sus amigos. ¿-¡Cómo, podía hacer esto?. ¡Era fácil!, Este, ¡era mágico!.

Al principio, la niña no sabía nada, le encantó cuando se lo regalaron. Era pequeño, lo podía poner encima de su mesita de noche y así lo tenía cerca de la cama, para que a la hora de dormir, guardar sus joyas, y así lo hizo. Esa noche las guardo en el cajón de arriba, y a la mañana siguiente va a mirar y ya no estaban allí, entonces abre los otros dos cajones, primero el de en medio y luego el de abajo, y por fin en este estaba, pero ella se acordaba perfectamente de haberlo puesto en el de arriba y empezó a pensar que algo le pasaba al joyero. Fue entonces cuando empezó a dormir con un ojo abierto y el otro cerrado, para ver si descubría su secreto, pero no había forma, acababa por vencerle el sueño y por la mañana otra vez igual, el joyero parecía que estaba vivo y quisiera jugar con ella: O las cambiaba de lugar, o se las desaparecía hasta el día siguiente.

No esperando más se lo dijo a su madre:
- ¡Mamá, mamá, ven y mira el joyero, es mágico!. Y la madre llegó donde la niña y dijo:
- Pero nena, que dices, como va a ser mágico. Y la niña presurosa le contó todo lo que había hecho el joyero, pero a los cinco años de la niña, para la madre, en la mente de la niña se mezclaban fantasía y realidad.

La niña sabía que la madre no se estaba creyendo nada de lo que le contaba, y le dijo: - Mamá, dame tu anillo y lo guardamos aquí y vemos lo que pasa mañana, entonces la madre miró a la niña y sin saber porque lo hizo. Era ya la hora de acostarse, pero a la niña le costaba dormir, miraba de reojo a la cajita por si hacía de las suyas, pero nada, y ya se quedó “roque”, dormida del todo. A la mañana siguiente, la madre estaba preparando el desayuno, cuando la niña bajo por las escaleras, dijo:

-Mamá, no ves como era cierto, mira ya no está tu anillo y yo no lo he cogido, pero no te preocupes que mañana aparecerá, él solo quiere jugar. Y así fue, a la mañana siguiente apareció. La madre no se lo creía y la niña iba saltando y dando vueltas alrededor de la madre canturreando ha aparecido, tengo un joyero mágico y el anillo ha aparecido. La mamá le dijo:
- ¡Valla! Nenita, ¡es verdad!. Es un joyero mágico, guardalo como un tesoro.
- ¡Sí mamá! Dijo la niña.

Y desde entonces juega con él, le gasta bromas a sus amigos, les hace trucos de magia: Los invita a cumpleaños, y con la varita dándole a la cajita dice unas palabras mágicas, y ¡Ale Job!, Desaparece lo que hallan guardado. Dice otras palabras mágicas y ¡Ale Job!, Vuelve a aparecer, y así hace creer a los niños que es muy buena haciendo trucos de magia, y se lo pasa muy bien todos los niños con su amiga.

Colorín colorado este cuento sé a acabado


Xela